José Thomas: “las puteadas (docentes) las veo en primera persona”
En el marco del pre Congreso de Educación que está realizando la DGE como telón de fondo para una nueva ley educativa, el director general se encontró un día antes por zoom con la militancia y explicó las razones por las cuales hacer la reforma. Una de ellas sería un reconocimiento del descontento docente.
La primera razón fue el compromiso asumido por el gobernador Rodolfo Suárez en la apertura de sesiones de la Legislatura el 1° de mayo pasado, “porque dimos la palabra, nos votaron para esto y lo estamos haciendo”.
La segunda, sería porque la Cámara de Diputados y la de Senadores “aprobó la creación de una comisión bicameral de educación…están esperando que se la enviemos (a la propuesta)…si no es ahora, ¿cuándo? ¿en marzo? Discutiendo paritarias, con problemas económicos, con elecciones de medio término y del SUTE en el medio…” explicó el funcionario.
“Tercero (…) más allá del cansancio por la pandemia, acá veo a muchos profes, todos con ojeras, sobre todo a los profesores de aula (…) la verdad están dejando todo, yo sigo estando en muchos grupos de profes y las puteadas las veo en primera persona del laburo que están haciendo, disculpen el término, o sea que lo reconozco ampliamente.
Pero la pandemia puso el tema de la educación como nunca, ustedes busquen si algún año se habló tanto de educación (como este)”.
Una parte de lo que dice el director general de Escuelas suena lindo, porque es un reconocimiento a la abrumadora y casi épica tarea docente en estos últimos siete meses.
Sin embargo, el mismo Thomas reconoce las “puteadas” de los educadores con un sistema educativo claramente precarizante y excluyente en muchos sentidos, con una carga horaria que se ha duplicado como mínino, tal como lo ha dejado manifestado recientemente el Sindicato Unido de los Trabajadores de la Educación (SUTE).
De hecho, mientras el precongreso ocurría en la plataforma Zoom era transmitido en vivo por el canal de Youtube de la DGE pero -y no es un detalle menor- configurado para que no se pudiesen hacer comentarios. Pero las votaciones de los usuarios, una opción que no puede ser anulada en esa red, dejó ver el malestar al momento de publicación de esta nota: 1371 “me gusta” contra 7687 “no me gusta”.
En un año de excesiva carga horaria y sin paritarias salariales, pareciera ser que la reforma educativa que podría dejar sin trabajo a muchos educadores no sería la mejor forma de calmar los insultos virtuales.